Solo es una historia más, palabras vacías que se llevará el viento, pues nadie las escuchará...
Pero aquí y ahora son mis sentimientos y pensamientos más profundos, mis temores e ilusiones, mi vida en un instante contado...
Te atreviste a despertar a mi corazón de su oscuro letargo
y ahora te arrepientes de lo que hiciste,
pues no reconoces al monstruo que tu mismo creaste...
Sola y abandonada en una carcel me dejaste,
mi corazón quedo oxidado por la falta de tu amor...
¿Aún esperas que sea la de antes?
Te di toda mi vida y a cambio recibí mentiras...
Intento estar a tu lado de nuevo;
pero solo me llevo decepciones.
¿Qué puedo hacer?
No soy la princesa que dejaste olvidada...
Ya no quiero sufrir más...
Si no soy aquella a la que amas, dejame ya.
Si no soy aquella a la que amas, dejame ya.
Busco una razón por la que seguir y en el camino solo tropiezo con mis propias piedras...
Y MI POBRE CORAZÓN DE HIERRO... SE ME FUE OXIDANDO CON LAS PENAS (Fito y Fitipaldis)
